Amistad, bonita palabra.

Os dejo un fragmento sobre como entendian la amistad los indigenas americanos.



"Lo ultimo que vi de mis amigos Mandans fue en la playa del rio delante de su poblado.Mi canoa y todos mis fardos fuerón bajados hasta la orilla del agua, y mi canoa fue colocada en el agua, con toda la tribu en la playa.Mi amigo Mah-to-toh-pa, el jefe lobo y el Gran medicina me abrazarón sucesivamente;los guerreros y bravos me estrecharón la mano, y las mujeres y los niños me saludarón con gritos de adios; Batiste, Bogard y yo estuvimos otra vez a bordo y de camino a St Louis.
En este emocionante momento, cuando habiamos entrado ya demasiado en la corriente para parar , y ya navegabamos, un valiente y joven guerrero a quien reconocí nos siguio por la orilla, e inclinandose hacia adelante, echó al interior de la canoa un paquete que sacó de debajo de su manto; y viendome tratar de abrirlo agitó la mano y sacudió la cabeza , y me hizo la señal de que lo dejara en la canoa , cosa que hice.
Despues de que habiamos recorrido una milla o asi desde el poblado, entre mi remo y abrí el paquete desatando un montón de correas, y , para mi sorpresa encontré el mas maravilloso par de polainas que habia visto jamas, orladas con profusión de mechones de cabellos y bellamente adornadas con puas de puerco espín.
Al momento las reconocí como perteneciente al hijo de un jefe famoso, el " Cuatro hombres" , y como el mismo par que habia estado intentando comprar durante algun tiempo, y por el que habia ofrecido al joven un caballo , sin otra respuesta que "no podia venderlas, pues los mechones de cabello eran trofeos muy valiosos, y sus camaradas se reirian de él si las vendia"
¡Que gesto tan bello de profunda, sincera y leal amistad este! Habiendose separado de mi sin la menor esperanza de volver a verme nunca, me obligaba a aceptar como regalo lo que no pudo venderme el dia anterior por el precio de una caballo. Y lo envolvía con un enrredo de correas que él se habia propuesto que yo no pudiera desatar hasta que la corriente se me hubiera llevado lejos de la posibilidad de poder ofrecerle una compensación por ello."


Un saludo a todos.


PD: Que pena haberlos "civilizados".

Amistad, sin duda una hermosa palabra, por desgracia mal comprendida y usada por la mayoría, es curioso oír o leer como la gente la utiliza de forma banal, y más ahora en la era cibernética "yo tengo 1200 amigos" ¿quieres que te agregue como amigo? "315 personal han solicitado ser tus amigos"..... otros conciben la amistad como un recurso para "obtener" y en el fondo mantendrán tu amistad mientras estés dispuesto a dar o a servir, llegado el momento de pedirles un mínimo esfuerzo o corresponder, su "amistad" se desintegra.
De ahí, que al menos yo, que sea cauto en otorgar ese valioso título de amigo solo a quienes en verdad se lo merezcan y lo hayan demostrado, los demás, son conocidos, compañeros de afición, coincidentes laborales etc.
Por eso al leer este post José María, quiero decirte ¿que razón tienes AMIGO!
Saludos.

bonito fragmento Compare, como dice Alfredo no es facil otorgar el titulo de amigo a cualquiera que se cruza en tu camino.
para adquirir ese titulo hay que estar donde hay que estar.
por lo menos asi lo siento yo.


bueno compare haber si te animas y nos pones unas fotillos de esos pajaritos.

chanaque escribió:Os dejo un fragmento sobre como entendian la amistad los indigenas americanos.



"Lo ultimo que vi de mis amigos Mandans fue en la playa del rio delante de su poblado.Mi canoa y todos mis fardos fuerón bajados hasta la orilla del agua, y mi canoa fue colocada en el agua, con toda la tribu en la playa.Mi amigo Mah-to-toh-pa, el jefe lobo y el Gran medicina me abrazarón sucesivamente;los guerreros y bravos me estrecharón la mano, y las mujeres y los niños me saludarón con gritos de adios; Batiste, Bogard y yo estuvimos otra vez a bordo y de camino a St Louis.
En este emocionante momento, cuando habiamos entrado ya demasiado en la corriente para parar , y ya navegabamos, un valiente y joven guerrero a quien reconocí nos siguio por la orilla, e inclinandose hacia adelante, echó al interior de la canoa un paquete que sacó de debajo de su manto; y viendome tratar de abrirlo agitó la mano y sacudió la cabeza , y me hizo la señal de que lo dejara en la canoa , cosa que hice.
Despues de que habiamos recorrido una milla o asi desde el poblado, entre mi remo y abrí el paquete desatando un montón de correas, y , para mi sorpresa encontré el mas maravilloso par de polainas que habia visto jamas, orladas con profusión de mechones de cabellos y bellamente adornadas con puas de puerco espín.
Al momento las reconocí como perteneciente al hijo de un jefe famoso, el " Cuatro hombres" , y como el mismo par que habia estado intentando comprar durante algun tiempo, y por el que habia ofrecido al joven un caballo , sin otra respuesta que "no podia venderlas, pues los mechones de cabello eran trofeos muy valiosos, y sus camaradas se reirian de él si las vendia"
¡Que gesto tan bello de profunda, sincera y leal amistad este! Habiendose separado de mi sin la menor esperanza de volver a verme nunca, me obligaba a aceptar como regalo lo que no pudo venderme el dia anterior por el precio de una caballo. Y lo envolvía con un enrredo de correas que él se habia propuesto que yo no pudiera desatar hasta que la corriente se me hubiera llevado lejos de la posibilidad de poder ofrecerle una compensación por ello."


Un saludo a todos.


PD: Que pena haberlos "civilizados".

Yo, hasta que no te cortes el pelo, no seré tu amigo.